miércoles, 5 de agosto de 2009

Mosaico

Un fuerte estrépito de metal desgarrado se alzo, increíblemente, sobre los sonidos del metal en mis audífonos. Levante la vista al frente, para encontrarme con una ambulancia achatada contra un camión de cemento. Las luces del vehiculo mas pequeño seguían ondeando en la semi oscuridad del atardecer. En ese medio segundo de impacto, deduje que iba ocupada. Que tipo con más mala suerte. Y en ese momento, un maligno pensamiento invadió mi mente. Traté de rechazarlo, pero estaba ahí, ya lo había pensado, era demasiado tarde. Que excelente chiste cruel. Quizás que circunstancias llevarían a la persona enferma a tener que ser llevada a toda velocidad, irresponsablemente, hacia algún hospital o clínica. Quizás sólo tenía un corte, o quizás estaba en trabajo de parto. Mierda. Esto último me horrorizo. Tenia que hacer algo. Vi al adolescente correr hacia el sitio del choque, el que ocurrió frente a mis ojos, y me quede muda lo suficiente como para irritar a la Sofía al otro lado del teléfono. Le corte. ¿Qué se propone hacer ese joven? Parecía que venia del colegio, pues andaba con mochila y además llevaba sus audífonos puestos. Levante de nuevo el celular pensando a quien llamar. Otra ambulancia solo aumentaría la cómica situac… cómica… si, había que admitirlo, una ambulancia chocando. Me decidí por los bomberos, que ellos se encargaran del resto. El teléfono no alcanzo a sonar una vez antes de que lo descolgara. Una voz de mujer joven, en evidente shock, resonaba al otro lado del teléfono. Un accidente de tráfico, de un camión de cemento impactado por una ambulancia. ¿La ambulancia llevaba algún paciente? Por lo visto si, y había un par de personas, un caballero asustado y frío ayudando al valiente muchacho que parecía saber lo que hacia. Parecía enfocarse en el paciente de la ambulancia. Yo estaba paralizado en mi lugar. Quería hacer algo, ayudar al chico como el caballero, o, como la atractiva universitaria, llamar a la ambulancia… no mejor a los bomberos, la agregar otra ambulancia más a la extraña escena seria ridículo. Pero estaba paradote ahí, sin hacer nada. Apenas puedo respirar, solo recuerdo ir en una ambulancia. ¿Por qué? Y, al momento de recordarlo, el dolor volvió. Deseé haber seguido inconciente, pero Dios no era tan bueno. Me detuve un momento a pensar. Quizás era necesario que despertase. Si, si Dios quisiese que muriera, no habría vuelto. Pero quería que viviera. Había sufrido una trombosis en la pierna, no en el corazón como en los pronósticos. Había chocado en una ambulancia de camino al hospital, pero había despertado. Definitivamente Dios quería que no muriera. Mi mente pensaba más rápido que nunca. Más rápido que en las pruebas, que era, de verdad mucho decir. Recuerdo todo. Escuela de Verano, anatomía. La clase de primeros auxilios. Si, es simple, así hay que moverlo, y sobretodo así no. Vamos, que el caballero me ayuda. Eso, puerta fuera. Ahí esta, el hombre tirado, me mira con ojos esperanzados. No puedo evitar una sonrisa, pues es un hombre, lo que elimina la posibilidad de que este embarazado. Otra sonrisa, más fuerte, tras esa palabra. El hombre me devolvió una sonrisa refulgente. Debió interpretar que yo juzgaba que estaba bien. Aunque en realidad no era mentira. Parecía que el móvil había resistido bastante bien el impacto. No así la cabina. Pero ese no es mi problema ahora. No lo soporto más. Salí a vomitar fuera de la impactada cabina. No entiendo como el joven a mi lado es capaz de sonreír. Hay sangre por todos lados. El hombre también sonrío. Impactado, me di la vuelta. Me tire al piso, incapaz de hacer algo más, moví al hombre que estorbaba el paso del valiente joven. Había llamado hace ya un buen rato a los bomberos. Apague de una vez el celular, la Sofía no paraba de llamar y me tenia aburrida. Mire a la distancia acercarse el carro de bomberos.

2 comentarios:

  1. Un verdadero mosaico de imágenes que no dejan nada y todo al azar de una mente que espera un relato cronológicamente ordenado y formal. El vértigo que generas es excelente. La confusión también.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Buen Cuento =), pude entenderlo x), sigue escribiendo...

    SASA =P


    Pd: Humanistaaaa!!!!! XDDD (just kidding )

    ResponderEliminar